En el momento de ejecutar cualquier obra es necesario contratar un aparejador, un arquitecto técnico o un ingeniero de edificación; agentes responsables de intervenir en las etapas del proceso de construcción y durante el ciclo de edificación.

Las diferentes competencias que tienen responden a la figura de técnico de cabecera de las edificaciones, las atribuciones de los cuales pueden ser realizar proyectos de construcción de edificios, proyectos de urbanismo, dirigir la ejecución de una obra, coordinar la seguridad, o bien realizar informes, peritaciones, modificaciones, certificados energéticos, entre otros.

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¿Aparejador o arquitecto técnico?

El aparejador, el arquitecto técnico o el ingeniero de edificación, son los encargados de la dirección de la ejecución material de las obras, donde también se le adjudican las tareas de supervisión y control del trabajo del constructor, según el que ha proyectado un arquitecto previamente.

A pesar de que las respectivas nomenclaturas corresponden al nombre de las titulaciones que se establece en función de la política en curso, los diferentes conceptos responden a las mismas competencias. Con la consolidación de la Ley de Ordenación de la Edificación 38/1999 del 5 de noviembre a la LOE, se definieron las intervenciones de los agentes de la edificación, y se atribuyó al arquitecto técnico y al aparejador la autonomía respeto los otros profesionales de la construcción.

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¿Por qué necesito contratar un aparejador o un arquitecto técnico?

Como comentábamos en la anterior publicación sobre los planes de autoprotección para casos de emergencia, es necesario contactar con un profesional competente para que nos elabore y nos firme el proyecto donde se establezcan las actuaciones ante una situación de emergencia. En este sentido, también es necesario para la redacción de proyectos técnicos de legalización de instalaciones eléctricas, pues hay que disponer de un buen asesoramiento técnico en la instalación eléctrica de un local.

Si lo que quiere es abrir un negocio, y en consecuencia disponer del proyecto, también tendrá que contactar con un especialista en arquitectura técnica. La persona encargada de redactar la documentación técnica previa para la solicitud de licencia de obras tiene que ser un profesional cualificado, tal como explicábamos en el pasado artículo sobre la apertura de un negocio en Palma de Mallorca.

También puede necesitar un aparejador o arquitecto técnico si tiene que elaborar un proyecto de obra, como en el caso del proyecto que explicamos de obras menores y de apertura para un negocio en Igualada. O bien, en caso de unas obras ya ejecutadas, elaborar un informe técnico pericial para poder contemplarlas y darles validez.

Contactar con un profesional de edificación también es necesario en casos de segregaciones, cédulas de habitabilidad, proyectos de reforma, movimientos de tierras, dirección de ejecución de obras, coordinación de seguridad y salud, entre otros.

 

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